«Palo si boga y palo sino boga», clásico refrán popular. Se utiliza para referirse a una situación en la que alguien es castigado o reprendido sin importar lo que haga. Esta frase resume la idea de que la vida no es justa y de que a veces, no importa lo que hagamos, siempre habrá alguien que nos criticará o nos tratará injustamente.
Es lo que le estaría pasando al gobierno en su alegada lucha contra la corrupción y sus detractores, pues evidentemente al no presentar a la fecha resultados notables, la oposición y críticos consideran que es más de lo mismo, lo que entonces seria para el gobierno “palo si boga y palo sino boga”.
En un país en el que todos tienen una opinión y las redes sociales nos dan una plataforma para expresarla. Es fácil sentirse abrumado y juzgado constantemente. Por ejemplo, los influencers en línea, son criticados por todos, desde lo que comen hasta cómo se visten y cómo educan a sus hijos. Es como si no importara lo que hagan, siempre habrá alguien que los critique o los juzgue.
Pero, ¿por qué es así? ¿Por qué pareciera que siempre estamos siendo evaluados y críticos sin importar lo que hagamos? Una posible explicación es que vivimos en una sociedad que valora la perfección y la excelencia. Desde muy temprana edad, se nos enseña que debemos ser los mejores en todo lo que hacemos, desde las calificaciones en la escuela hasta nuestros trabajos y relaciones personales. Y cuando no cumplimos con estos estándares, nos sentimos fracasados y somos juzgados por ello.
En tal sentido esta sociedad ya posee la capacidad de poder evaluar con juicio crítico si las acciones del gobierno en materia de lo que ha prometido lo está cumpliendo, creo que ya hay cierto cansancio de ver mucho palo si boga y poco palo sino bogas.
Además, las redes sociales han creado una cultura de comparación constante, en la que nos comparamos con otros y nos sentimos mal si no cumplimos con sus estándares. Vemos las fotos perfectas de las vacaciones de nuestros amigos en Instagram y nos sentimos mal por no poder irnos de vacaciones también. Vemos a nuestros compañeros de trabajo obteniendo promociones y nos sentimos mal por no tener una también. Esta constante comparación nos hace sentir que siempre estamos en desventaja, que siempre estamos bogando contra la corriente y que, sin importar lo que hagamos, siempre recibiremos un «palo».
En resumen, la frase «Palo si boga y palo sino boga» puede parecer desalentadora, pero no debemos dejar que nos impida navegar en la vida y alcanzar nuestras metas. Debemos aceptar que la vida no es perfecta y que siempre habrá personas que nos critiquen o nos juzguen. Pero si nos enfocamos en nuestras propias acciones y actitudes, podemos superar estos obstáculos y encontrar el éxito y la felicidad en nuestras propias vidas.