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Cuando el sistema teme a una líder: Yadira Marte y la lucha por la patria

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Otto Mañón

Por qué el sistema busca silenciar a Yadira Marte

En la historia política dominicana, han existido figuras que desafían el status quo, que no se someten a las componendas ni al clientelismo que por décadas han dominado la esfera del poder. Hoy, Yadira Marte se suma a esta lista de líderes valientes, una mujer con un discurso disruptivo, que denuncia las estructuras de corrupción en el país y que, por ello, se ha convertido en un blanco de la Junta Central Electoral (JCE), que intenta cerrarle el paso a su legítima aspiración de postularse de manera independiente.

La negativa de la JCE de permitir su candidatura sin la estructura de un partido tradicional pone en evidencia el miedo del sistema a las voces que no pueden controlar. Argumentan que no puede ser candidata independiente, pero la realidad es que lo que se busca es impedir que alguien con principios morales, patriota y un liderazgo genuino rompa con el monopolio de la corrupción que los engorda.

Esto no es solo un ataque a Yadira Marte. Es un ataque directo a la soberanía del pueblo dominicano y a su derecho de elegir sin imposiciones ni pactos oscuros.

Un perfil psicológico de una líder fuera de lo común

Desde un punto de vista psicológico, Marte representa el arquetipo del líder disidente, una persona con una convicción inquebrantable, resistente a la manipulación, con una visión clara y sin miedo al enfrentamiento con las fuerzas más poderosas del país.

Posee una alta tolerancia a la frustración y una resiliencia extraordinaria, características típicas de los grandes líderes que han marcado la historia. Su enfoque directo y su determinación la hacen inmune a las presiones de los poderes políticos y económicos. Marte no solo tiene el coraje de denunciar la corrupción, sino que tiene la capacidad de movilizar y despertar la conciencia de los ciudadanos, algo que representa una amenaza para un sistema que sobrevive del letargo de su gente.

Además, su independencia política y su resistencia a la manipulación emocional revelan un alto nivel de inteligencia emocional y fortaleza mental. No necesita la aprobación de las élites ni de la maquinaria corrupta para validar su liderazgo.

El miedo del sistema a un liderazgo auténtico

Desde un análisis político y patriótico, la exclusión de Yadira Marte del proceso electoral es un acto de censura institucionalizada, un intento descarado de impedir que una candidata sin ataduras partidarias pueda postularse con un discurso genuinamente nacionalista.

Su liderazgo se basa en la defensa de la soberanía nacional, el rechazo a los acuerdos turbios con organismos internacionales y la denuncia de cómo la inmigración descontrolada está afectando la identidad y la economía dominicana. Estas posturas han sido consistentemente ignoradas por la clase política tradicional, que prefiere mantener su agenda de sumisión a los intereses globalistas.

Los partidos políticos han demostrado, con hechos y no con palabras, que no trabajan por el bienestar del pueblo dominicano, sino por su permanencia en el poder. La negativa de la JCE a permitir que una persona como Marte pueda competir de manera justa demuestra que el sistema no es democrático, sino una maquinaria diseñada para perpetuar a los mismos de siempre.

El impacto económico de un sistema corrupto vs. la propuesta de Yadira Marte

Desde una perspectiva económica, la corrupción política en República Dominicana ha costado miles de millones de pesos al pueblo. Cada año, el desvío de fondos, los contratos amañados, las exenciones fiscales a grandes empresarios y el clientelismo político generan un drenaje financiero que impide el desarrollo sostenible del país.

Yadira Marte propone una alternativa disruptiva:

1. Eliminar el financiamiento estatal a los partidos políticos y destinar esos recursos a inversión social y generación de empleos.

2. Aplicar auditorías constantes y sanciones drásticas a los funcionarios que roban al Estado.

3. Impedir el uso del dinero público en campañas electorales, para evitar la compra de conciencias.

4. Promover un modelo económico basado en el fortalecimiento de la producción local y la eliminación de privilegios fiscales a grupos de poder.

Si estas medidas fueran aplicadas, el país tendría suficiente presupuesto para mejorar la educación, la salud y la seguridad sin necesidad de endeudarse internacionalmente. Sin embargo, el sistema no quiere cambios estructurales, porque los actuales mecanismos de corrupción benefician a quienes controlan el poder.

El derecho constitucional de todo ciudadano a postularse

Desde un punto de vista jurídico, la decisión de la JCE de bloquear la candidatura independiente de Yadira Marte es anticonstitucional. La Constitución de la República Dominicana establece claramente en su artículo 22 el derecho de todo ciudadano a ser elegido, sin que esto implique la obligación de pertenecer a un partido político.

El argumento de la Junta de que “no se puede postular sin un partido” no es más que un mecanismo para proteger a la oligarquía política, garantizando que solo aquellos que se someten al sistema puedan acceder al poder.

En un verdadero Estado de derecho, una persona con respaldo popular debería tener la posibilidad de postularse sin estar atada a las estructuras de corrupción partidaria.

El pueblo debe despertar

El caso de Yadira Marte no es solo una historia de persecución política. Es un reflejo de cómo el sistema político dominicano ha evolucionado para convertirse en una dictadura disfrazada de democracia.

El pueblo dominicano debe entender que la única manera de recuperar su país es exigiendo cambios reales, no permitiendo que los mismos de siempre sigan manipulando las reglas del juego.

Si la JCE logra su cometido y bloquea la candidatura independiente de Yadira Marte, no solo estarán impidiendo que ella compita, sino que estarán enviando un mensaje claro al pueblo: el sistema está diseñado para que los ciudadanos nunca puedan elegir fuera de las opciones que el mismo sistema impone.

Es hora de que la gente despierte y entienda que el verdadero enemigo de la democracia no son los candidatos disidentes, sino el sistema que los silencia.

#POLICristianizando

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Otto Mañón es pastor de Iglesia Casa de Bendición Inc., Marietta, GA, freelancer comunicador, miembro de la Coalición Dominicana de Atlanta Georgia y ex editor de los medios hispanos de Pennsylvania Esperanza Comunitaria, Acento Hispano News y @tiempo news.

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