
La Constitución está de fiesta y hay que celebrarlo. El 179 aniversario de su proclamación es un buen motivo para celebrar la que se puede considerar como el acta de un Estado, la ley fundamental que le confiere personalidad jurídica al Estado y los poderes públicos.
El momento es propicio para que esta nación celebre «la biblia institucional de gobernantes y gobernados», como en varias ocasiones el doctor Milton Ray Guevara ha llamado al texto sustantivo.
Es bueno recordar que el 27 de febrero de 1844 el pueblo dominicano proclamó su independencia política y creó un Estado con el nombre de República Dominicana que durante los primeros meses de su existencia política, el joven Estado dominicano tuvo una constitución provisional, el Manifiesto del 16 de enero de 1844.
Luego vino la promulgación de la norma fundamental, en San Cristóbal por el Congreso constituyente de la República, el 6 de noviembre de 1844, cuyo texto invoca de forma interesante elnombre de Dios, guiado por el ideario del padre y fundador de la República, Juan Pablo Duarte, que sentó el origen histórico del nacimiento jurídico del Estado dominicano.
El Tribunal Constitucional, fiel defensor, desde su instauración, de la supremacía de la carta magna, se regocija en este nuevo aniversario, e invita a los diferentes sectores a participar con entusiasmo al programa de actividades que incluye: la Gala por la Constitución, celebrada honor a Víctor-Víctor, la audiencia solemne en el Auditorio Menor Profesor Amarabis Suero del Instituto Politécnico Loyola, San Cristóbal, la Jornada de Lectura con la participación de 277 estudiantes de diferentes centros públicos y privados.
Tam a participar en la caminata que se realizará en el parque Mirador Sur en honor a la Constitución, la Jornada de Reforestación en el Parque Ecológico, en Nigua, San Cristóbal y la puesta en circulación de publicaciones.
179 años después de articularse las bases institucionales del Estado dominicano, como lo expresara en magistrado Lino Vasquez Samuel, segundo sustituto del Presidente del Tribunal Constitucional: «La Constitución vigente, representa la continuidad del ideario constitucional duartiano, quien antes del nacimiento de la República, había concebido un proyecto de Constitución que representaba la garantía contra el atropello, abuso y arbitrariedad en el ejercicio del poder».
Expresaba Vásquez Samuel en sus palabras ante magistrados y servidores constitucionales reunidos en el acto de enhestamiento de la bandera nacional (sede principal), que la Constitución es la unidad en la diversidad, el pacto jurídico, político y social sobre el cual se basa la vida de los dominicanos, y la permanencia de los valores sociales.
En definitiva, el festejo de la Constitución debe comprometernos personal y colectivamente a cuidar, utilizar y mantener la carta magna en las generaciones presentes y seguir consolidando la democracia y el Estado de derecho al cual aspiramos.
