Por Bienvenida González / Psicología y Terapia Familiar
Como mujeres, solemos ser elevadas a niveles altos que se pueda imaginar; como también a niveles bajos de ponderación sobre quienes somos y para que existimos.
¿Qué motiva de un lado y del otro a quienes califican y descalifican a la mujer? Desde niña he escuchado que la mujer creada fue la culpable de la “desgracia de la humanidad”, justo cuando dio de comer la fruta prohibida al hombre creado. ¡Una inculpación que se ha proyectado en el tiempo!
La mujer ha sido la inspiración de escritores, poetas, diseñadores, modistos, la industria del cine, de la moda y la belleza y de hombres enamorados dispuestos a conquistarla. Lo interesante de todo esto es que mujeres de una u otra manera se han montado en estos vehículos y se han movido a la luz de dictámenes de aquí y de allá los cuales han ejercido un conjunto de influencias que de por sí,han generado niveles de angustia y desesperación en torno a su imagen corporal y sus competencias, estimulando así, la búsqueda constante de aprobación en sus contextos relacionados, familia y de la sociedad; como si de eso se tratara el valor intrínseco inherente a sí misma.
Toda mujer tiene su propia historia; historia que la ha llevado a guardar de manera consciente o no, trazados de pinceladas de distintos colores y texturas de lienzos, en los cuales su vida ha sido formada. ¿Cómo y de cuales maneras fuiste creciendo y guardando lo negativo y positivo de tu vida?
En este tenor, fui invitada al pasado Congreso de Mujeres: “Levántate”. Expuse en el mismo el tema de la “Resiliencia”. Fue una gran experiencia para mí, como mujer de años vividos no tan solo por mi exposición, sino también por el abordaje y estrategias del evento, cuyo hilo conductor se enfocó en ¿quién es la mujer y para qué existe?, y cómo levantarse y estar en pie cuando llegan las adversidades propias de la vida en esta tierra como el abandono, el abuso emocional, físico ,sexual y sobre todo la desvalorización montados estos en la descalificación y la invisibilidad propia y asignada en diferentes contextos.
¡Levántate! le movió el piso a varias mujeres;siendo yo una de tantas. Este evento de características singulares, guiado con la mejor intención de sus gestores y la aplicación de estrategias entusiastas y realistas, nos guio a entender aterrizare en el sentido de ¿Por qué? fuimos creadas por Dios y ¿Para qué? fuimos creadas por Él.
Se guio a las mujeres con presencia física y a las conectadas a través de las plataformas digitales a realizar una mirada integradora sobre sí mismas a la luz de Su Creador: Dios. Una mirada que guía a recuperar el valor y atributos dados por Dios en y desde el principio de los tiempos.
Mujer, ayuda idónea en todos los órdenes y diferentes roles. Una capacidad intrínseca, propia de ella, asignada por Dios y lejos de planteamientos y discursos sociales y culturales. Haga memoria de las diferentes acciones de la mujer en la destreza de ayudar de manera óptima y pertinente en momentos que requieren de su asistencia. Una asistenciasacrificial y de entrega a la familia, a tiempo y oportuna, no tan solo en ayuda idónea y ser unacarne con el hombre que la acompaña, abarca a sus hijos, padres, abuelos, amigas…una ayuda invaluable no necesariamente por ser bondadosa y sensible, sino porque se acoge a la función vital que le fue asignada por Dios, su creador.
A propósito de la celebración de la madre en un díay fecha del año, lejos de ser endiosada y elevada en el plano del discurso y felicitaciones, ponderar sus destrezas de amar, su fortaleza física y emocional y su conexión y dependencia del Dios amante que ladotó para que fuese ella misma, valiente y luchadora incansable en el dolor y la alegría.
¡Creadas por Dios para la misión de ayudar de manera idónea, como mujer, hija, hermana, esposa, madre y un ente de amor y transformación!