Tomás Rubio
Parece que las buenas noticias no venden. Quizás por eso los medios de comunicación nos amanecen y por la noche nos duermen con malas noticias. Hace años se editaba un periódico que solo publicaba buenas noticias y…cerró. Ahora, dado que el internet permite eludir los costos del papel impreso y la distribución, aparecen medios digitales que tratan de priorizar las buenas noticias, pero son poco conocidos. Tienen más rating los espacios dedicados a accidentes, asesinatos y sucesos similares.
El miedo nos hace inseguros, débiles y muy vulnerables…
Las buenas noticias no venden y además no producen miedo. ¿Y qué hay mejor que el miedo para tenernos encerrados en casa, temerosos de relacionarnos con ese desconocido vecino que a saber quién es y qué esconde? Se ejerce mejor y de forma más eficiente el poder si hay miedo de por medio. Y para que exista el miedo no es imprescindible recurrir a la violencia física. Basta que las malas noticias nos rodeen para que nos sintamos inseguros, débiles y muy vulnerables.
Somos lo que comemos, vemos, escuchamos…
Los niños saben de esto. Las malas noticas también les acosan. No solo las que ven y les hacemos ver por televisión o internet, sino también a través de nuestras conversaciones con chismes, críticas o sencillamente reproduciendo li…te…ral…men…te las peores noticias que acabamos de escuchar. Las malas noticias nos enferman mejor, podría ser el supuesto slogan de una campaña para vender ansiolíticos y otros medicamentos. Pero desgraciadamente, no es supuesto sino la realidad cruda que nos comemos diariamente. Y ya saben aquello de que somos lo que comemos; pero también lo que vemos y escuchamos.
Limpiar nuestros ojos y oídos…
La buena noticia es que siempre podemos hacer algo para mejorarnos y de paso directamente mejorar la vida de los niños. Les proponemos limpiar nuestros ojos y oídos de tantas malas noticias y sobre todo del ruido y griterío que les acompaña. ¿Creen imprescindible – para estar al tanto de los accidentes de tráfico – “disfrutar” a la hora de la comida con las imágenes de las víctimas de un choque frontal entre un camión y un auto? ¿Creen que estuvimos más informados sobre el Covid 19 cuando leíamos diariamente las supuestas cifras reales de fallecidos, infectados, en la UCI y recuperados?
El libro de las buenas noticias…
Y como en Di Capacidad nos gusta predicar con el ejemplo, les traemos esta propuesta que consiste en escribir o dibujar buenas noticias. Se llama el libro de las buenas noticias y lo pueden ir rellenando en casa toda la familia, en el aula con los estudiantes e incluso en el lugar de trabajo. Se trata de recoger cada día un dibujo y unas palabras sobre cuál fue la mejor noticia del día.
Además de que lo vamos a hacer con una sonrisa – y esto ya es sanador – nos sirve para recordar juntos la jornada y compartir los momentos vividos. También ayuda a que los niños vinculen la escritura a la reflexión. Y si no escriben – o todavía les gusta poco – pueden dibujar, que también es una manera de reflexionar.
Ah, otra buena noticia es que no es necesario gastar dinero en comprar un libro o cuaderno en blanco. Pueden hacerlo con un folder que pintamos como portada y graparle unas hojas en blanco. Ya saben, las buenas noticias llegan gratis.
Tomás Rubio / Equipo Di Capacidad (Santo Domingo) Di Capacidad es un espacio inclusivo de arte y educación humanista. 809 434 1111
