San Juan, Puerto Rico. La cantante cristiana Mariacarmina lanzó su primer álbum musical “Nueva canción”, cuyas canciones son un reflejo del aliento que recibió por parte de Dios en momentos de tribulación.
El disco contiene siete canciones en ritmos variados, todas compuestas por ella, y donde, de alguna manera, se repite el concepto que da nombre a la producción.
“Todas fueron escritas en tiempos de necesidad, mientras buscaba el rostro de Dios, en ese tiempo personal mío con él. Para ese entonces, mi canción era de tristeza, frustración, temores, pánicos, muchas cosas horribles, y Dios utilizó la música y muchas de estas canciones para traerme un nuevo propósito, para regalarme una nueva canción, una canción de esperanza, el amor y la seguridad de que él era todo lo que yo necesitaba”, expresó.
El primer sencillo en promoción es “Oseas”, en referencia al profeta que Dios le asignó casarse con una prostituta, sobre la que le advirtió que seguiría buscando de amantes. En el libro, que forma parte del antiguo testamento, Dios compara a la esposa de Oseas con la infidelidad del pueblo de Israel.
“Es una canción de restitución, de que nosotros muchas veces tropezamos una y otra vez con la misma piedra. Dios está presto para restaurar nuestro corazón, pero debe haber de nuestra parte también un cambio de camino”, explicó sobre el tema pop.
“La melodía es alegre, lo cual contrasta un poco con la letra. Esta canción habló a mi corazón. Este sencillo surgió en un tiempo de intimidad entre Dios y yo, un tiempo de oración. Estaba leyendo la palabra, y me topé con esta historia, que me resultó muy interesante, y me confrontó un montón”, expresó Mariacarmina.
La canción fue lanzada con un video, grabado en la Finca de Rústica, en Naguabo; producido por Keneth Morales, de la compañía White Moon Productions; y dirigido por José “Tito” Rojas.
“Creo el video plasma perfectamente este concepto de que a pesar de que a veces Dios tiene que llevarnos al desierto, él es capaz de convertir nuestro desierto en un oasis donde refresca nuestro corazón y nos hace volver a él”, indicó.
Además de “Oseas”, el álbum incluye las canciones “Nada me separa de tu amor”, “Eres el Rey”, “Salmo 27”, “Mi refugio eres tú”, “Vivo porque vives” y “Anclado a tus pies”. Esta última fue compuesta en colaboración con su hermano, Antonio Arzón.
La producción se grabó mayormente en el estudio de George de León Jr., en Naguabo. De León además, estuvo a cargo de los arreglos y la mezcla, mientras Esteban Piñeiro se ocupó de la masterización. El cantante Carlos Manuelle Agosto se unió a ella en los coros. De otro lado, la carátula del disco fue diseñada por Ed Creativo, y mantiene una estética minimalista en tonos de gris.
Mientras, la humacaeña promociona su disco y sencillo, se mantiene firme en su objetivo de continuar grabando los temas que ha escrito. Más que hacerse famosa, su propósito es continuar exaltando el nombre de Dios.
“Mi propósito es que el nombre de Dios sea engrandecido, que la gente lo conozca a él, que, si él ha permitido que yo tenga unas vivencias para honrar su nombre, que la gente pueda verle a él a través de mis canciones”, subrayó.
Los temas que integran el disco “Nueva canción” ya se encuentran disponibles en las plataformas digitales. Para contrataciones e invitaciones, pueden comunicarse al 787-605-2936 o, por email, a mariacarmina.arzon@gmail.com.
Sobre la cantante
Mariacarmina Arzón Maldonado nació en Humacao, pero actualmente reside en Naguabo. Es hija de Luis Arzón y Maricarmen Maldonado, pastores de la Iglesia Jesucristo Señor Nuestro, ubicada en el barrio Mariana de Humacao, donde se congrega desde pequeña. Está casada con Edgardo López, y es madre de Milena Isabel, de un año y medio de nacida. Es maestra de profesión y patóloga del habla.
La cantautora dice que la música está en su vida desde que tiene “uso de razón”. Este arte le corre por las venas, pues su abuelo materno era saxofonista y tuvo una agrupación llamada los Cantores del Mesías, con la que viajó a muchos países de Europa y América. Además, tenía una voz privilegiada. Su madre, por su parte, inculcó también el amor por la música debido a la influencia de su abuelo. Su papá, de otro lado, guitarra clásica en la Escuela Libre de Música de Humacao, y su hermano es baterista. Sus progenitores participaban en el grupo de adoración de su iglesia, así que, desde bien pequeña, acudía a los ensayos con ellos. “A mis dos años, la mayoría de las canciones que se cantaban en la iglesia, yo me las sabía”, afirmó.
Uno de los recuerdos que más atesora es que su mamá le había comprado un micrófono de juguete y ella solía llevarlo a los cultos, y desde su silla, cantaba.
Su primera actuación en público fue entre los 7 y los 8 años con el grupo de adoración en un devocional de la iglesia, con el tema “Cansado del camino”.
En el 2012, durante un viaje a misionero a Cuba sintió que tenía que dar a conocer la música que Dios le había estado regalando, cuando el grupo con el que viajaba fue recibido en la iglesia con una canción de su autoría. “Esa noche me quebranté y sentía cómo Dios hablaba fuertemente a mi corazón, diciéndome ‘mira todas estas canciones que te he dado, que has escrito para mí, ¿qué esperas para hacerlas conocer? No te las di para que las engavetaras. Te las di para que se escuchen en labios de naciones’”, recordó.
A su regreso en Puerto Rico, su hermano le cuestionó qué esperaba para grabar las canciones que había escrito, con lo cual confirmó su corazonada. Al poco tiempo, lanzó su primer sencillo “Siempre digno”.
Por otro lado, Mariacarmina asegura que su testimonio de fe más grande es haber podido mantenerse fiel y firme en los caminos del Señor desde que era una niña. Sin embargo, un suceso que la marcó, y en la que siempre su fe se mantuvo a prueba, fue el nacimiento de la hermana que tanto había deseado, a sus 11 años. La niña nació con múltiples condiciones de salud que afectaban principalmente su sistema motor y neurológico, por lo cual, estaba confinada en su cama. No podía hacer movimientos voluntarios, padecía de convulsiones, tenía dificultades para respirar no tenía control de secreciones ni podía tragar bien, razones por las cuales tenía una traqueotomía y una gastrostomía, y no podía hacer sus necesidades fisiológicas por su cuenta.
“Fue un tiempo sumamente difícil como familia, y para mí un tiempo sumamente difícil como hermana y como hija, porque no solamente me tocó ver sufrir a mi hermanita con la que tanto soñé, sino que también me tocó ver sufrir a mis padres. Y eso no es fácil”, rememoró.
Esa situación solo pudo llevarla gracias a la música y la presencia de Dios en su vida.
Mariacarmina afirmó que por 13 años su familia y ella se mantuvieron firmes en sus peticiones de sanidad para la niña. Poco tiempo después de comprender que, si bien Dios es capaz de obrar milagros, también es soberano en sus decisiones, su hermana falleció en 2015.
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