Las vacunas ayudarán a controlar y paliar el coronavirus, pero no a erradicarlo. «La ventaja de la vacuna es que podemos disminuir de manera muy importante el número de muertes, los casos graves y el impacto en la sociedad en general, y en ese sentido podríamos regresar a una vida normal», ha señalado este lunes el director de Emergencias Sanitarias de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Mike Ryan.
Por su parte, el director general de la organización, Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha avisado de que esta semana se espera llegar a los 100 millones de personas contagiadas de coronavirus en todo el mundo.
Por ello, ha destacado la necesidad de «llorar» por las personas que han fallecido como consecuencia de la infección por Covid-19 y, a la vez, hacer «todo lo posible» para evitar contagiarse y, por ende, transmitir la enfermedad. «Las vacunas ahora nos dan esperanza, por eso cada vida que perdemos ahora es aún más trágico», ha destacado.
«Cada día aumenta la brecha entre los que tienen y los que no tienen. La pandemia nos ha recordado que la salud y economía están relacionadas y que estamos todos en el mismo barco. La pandemia no terminará hasta que no finalice en todas partes», ha zanjado Tedros.