SANTO DOMINGO– En esta semana, nuestra población pasa por el dolor y consternación de conocer lo ocurrido a la pequeña Liz María, violada y asesinada con tan solo 9 años de edad por un supuesto amigo de la familia.
Como organización cristiana centrada en el bienestar de la niñez más vulnerable, nos preocupan todos los problemas que confronta la niñez dominicana, y nos alarma la persistencia de las diversas formas de violencia contra la niñez.
Es por esto que junto a la Coalición de ONGs por la infancia, grupo de Organizaciones No Gubernamentales que busca promover y garantizar los derechos de los niños, niñas y adolescentes en República Dominicana, alzamos nuestra voz, no solamente para que se haga justicia, sino para que se considere el estado de los derechos de la niñez en la República Dominicana.
De manera textual demandan:
“La Coalición de ONGs por la Infancia demanda en el día de hoy mayor protección contra el abuso y las agresiones sexuales cometidas en nuestro país contra los niños, niñas y adolescentes, tras la gran consternación por el lamentable caso de la violación y asesinato de una niña de 9 años, en el sector La Isabelita de Santo Domingo Este. El caso fue difundido por los medios de comunicación.
La Constitución Dominicana en su Artículo 56, la Ley Núm. 136-03 que crea el Sistema Nacional de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes, y la Convención sobre los Derechos del Niño reconocen el derecho de los niños, niñas y adolescentes a la protección contra cualquier forma de violencia, tipificando y sancionando la misma, así como el abuso y la explotación sexual y comercial. Las organizaciones miembros de nuestra Coalición expresan que, “la violencia y el abuso en todas sus expresiones, desde el castigo corporal y emocional, hasta el abuso y la explotación sexual, forman parte de la realidad de muchos niños y niñas en la República Dominicana.
Nos preocupa la debilidad en la respuesta institucional frente a la prevención y la respuesta a los casos denunciados. Aunque existen leyes, no necesariamente se cumplen, ni tampoco se asigna presupuesto suficiente para que los mecanismos de protección previstos funcionen”.
La protección de los niños y las niñas es responsabilidad de todos y todas. En primer lugar, del Estado, en calidad de garante de derechos, poniendo en marcha políticas para la prevención de estos hechos delictivos, y persiguiendo a quienes los cometen, dando, al mismo tiempo, respuesta oportuna a las víctimas para la restitución de sus derechos vulnerados.
La Coalición hace un llamado a la ciudadanía a participar activamente en la protección de los niños y niñas, denunciando cualquier situación de riesgo o de abuso en contra de la niñez de la que sean testigos. Así como también a las familias, las cuales necesitan seguir desarrollando habilidades para una afectividad consciente, desde un enfoque de derechos, con amor y límites, porque los niños, niñas y adolescentes necesitan crecer y desarrollarse en entornos protectores.
“Hacemos un llamado a las nuevas autoridades para que se intensifiquen los esfuerzos dirigidos a la efectiva aplicación de la Ley 136-03, y así garantizar la protección integral de los derechos fundamentales de los niños, niñas y adolescentes en el plano material, conforme lo establece el artículo 8 de la carta magna”, es la demanda de este conjunto de organizaciones.
En este sentido destacamos que el país cuenta con una Hoja de Ruta Nacional para la Prevención y Eliminación de la Violencia contra la Niñez, y que a cinco (5) años de su puesta en marcha, se requiere de una mayor voluntad política para lograr, en el corto, mediano y largo plazo, mayores y tangibles resultados en beneficio de la niñez. Recordamos que en el congreso reposa el Proyecto de ley de Crianza Positiva, así como la modificación al código civil para la eliminación de las excepciones que permiten en la República Dominicana el Matrimonio Infantil.
“Las nuevas autoridades del Poder Ejecutivo, del Poder Legislativo, y de los Gobiernos Locales, tienen una oportunidad de oro para favorecer una vida más digna, ahora y mañana, para nuestros niños, niñas y adolescentes. De la voluntad de ustedes depende un presente protector y garante de derechos, el futuro de las próximas generaciones, y que República Dominicana, sea un país para la niñez”.