Washington.- Uno de cada cinco jóvenes en América Latina entre los 15 y los 24 años ni estudia ni trabaja, lo que supone más de 20 millones en la región, y dos tercios de ellos son mujeres, indicó hoy un estudio del Banco Mundial (BM).
La cifra representa el 19,3 % del total de jóvenes en la región, y es especialmente elevada en Centroamérica, México y Colombia, con cifras superiores a la media regional y donde el problema se ve agravado por la presencia extendida del crimen organizado, explicó Rafael de Hoyos, uno de los coautores del estudio a Efe en una entrevista telefónica.
En América Latina, la proporción oscila desde el 10,9 por ciento en Perú a más de 25 por ciento en Honduras y El Salvador. En números absolutos, la mayoría de los “ninis”, como se denomina a este grupo, se encuentra en Brasil, Colombia y México, y una amplia mayoría, más del 70 por ciento, vive en ciudades y tiene un bajo nivel educativo.
Entre 1992 y 2013, la proporción de “ninis” descendió sólo marginalmente, pero su número absoluto se incrementó en unos 4 millones, en gran medida impulsado por el aumento entre los jóvenes varones.
En este periodo, el porcentaje regional ha pasado de representar el 23,4 % al 19,3 %, mientras que el número total creció de 16,4 millones a los 20,8 millones actuales. Por ello, el organismo advirtió que se trata de un problema “persistente”, ya que a pesar del buen desempeño económico de la región durante la primera década del siglo, con altas tasas de crecimiento y una reducción significativa de la pobreza y la desigualdad, este indicador no ha mermado de manera significativa.
El estudio, titulado “NiNis en América Latina- 20 millones de jóvenes en busca de oportunidades”, reveló los efectos negativos de esta problemática a largo plazo “sobre la productividad, reduciendo los salarios y las oportunidades de empleo de por vida y frenando el crecimiento económico en general”.
Un aumento del 1 % en el número de “ninis” supondrá un descenso en los ingresos del 7 % en los siguientes 20 años, según los cálculos del BM.
De Hoyos apuntó a Efe que el perfil típico del “nini” en América Latina es “una mujer que no ha terminado la educación secundaria y vive en un hogar urbano pobre o vulnerable”, y subrayó que las mujeres representan dos tercios de este grupo.
Como principal factor de riesgo entre las mujeres de convertirse en “ninis”, el estudio sitúa el matrimonio antes de los 18 años y el embarazo durante la adolescencia.
El vicepresidente del BM para América Latina y el Caribe, Jorge Familiar, aseguró al presentar el informe en el centro de estudios Wilson Center de Washington que los países que “ofrezcan una educación de alta calidad a una población joven en expansión y que cuenten con mercados laborales dinámicos y de buen funcionamiento podrán crecer y reducir la pobreza de manera más rápida”.
En el mismo acto, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, destacó la importancia de reforzar el sistema educativo, algo clave para reducir la gran desigualdad de América Latina, a la cabeza mundial en este indicador.
En general, América Latina se encuentra cerca del promedio global de “ninis”, que es de entorno 23 %. Asia Oriental registra la mayor cifra, con un 32 %; mientras que los países avanzados la menor, con un 11 %.
En todo el mundo, la cifra total de jóvenes que ni estudian ni trabajan es de 260 millones.